Sucedió lo que tanto temía! … aunque lo sabia quería escucharlo de tus labios, aunque no fue directamente de los tuyos mis oídos lo escucharon de otra boca y ella lo escucho de tus labios… esos labios. Te fastidia que te deje saber cuánto me gustas, lo bello que eres, lo bien que la paso contigo. No sabes lo que sentí al saber tus verdaderos sentimientos. Al fin ya sé que hacer… alejarme, decirte adiós, no comunicarme por mi bien y por tu tranquilidad, para no hostigarte con mis llamadas o mensajes. Ni siquiera le daré “like” a tu estatus en Facebook. Esperare que algún día me extrañes, extrañes aunque sea mi amistad, mis llamadas, mis consejos, mi sonrisa o mi cuerpo. Te borrare, borrare tus manos de mis caderas, borrare tus ojos mirándome con deseo, borrare tu apodo de mi mente, borrare las ganas que tengo de besarte, borrare la cancha de baloncesto de donde resides, borrare la forma en que pasas tu lengua por tus labios, borrare tus palabras de mis oídos, borrare las veces en que acaricie tu cabello, borrare tres canciones de mi memoria, se me olvidara que ordenas siempre bacon doble solo queso y bacon y un hershey pie en Burger King, se me olvidara donde vives, donde trabajas, donde te pasas, olvidare la ruta de tus labios besando mi cuello y mis pechos, olvidare tus manos acariciando mi espalda y agarrándome con fuerza por la cintura… te olvidare. Sé que sola cree mil historias en mi mente donde tú eras mi príncipe (y no el azul porque el azul ya le pertenece a Zoraya). No me diste alas, no me dijiste nada, todo lo fantasee yo, estas cosas nos pasan por el simple hecho de ser mujer… vemos cosas donde no las hay, nos hacemos de ilusiones creando historietas de cuentos de hada donde al final nunca seremos correspondidas, porque solo son inventos, producto de la imaginación; la maldita imaginación. Esa que me tortura día a día haciéndome cometer pecados, haciéndome llamarte porque estas sentado en el mueble esperando mi llamada, la que me hace invitarte porque deseas salir conmigo… maldita imaginación hipócrita! Esa cabrona me hace imaginarte en mi cama desnudo, me hace imaginarme contigo en el cine, en un parque, me hace imaginar que cuando me llamas es porque pensaste en mi y no por la verdadera razón (que necesitas un favor), maldita mil veces maldita mi imaginación, la arrancaría de mi mente y la enviaría contigo para que puedas crear en tu mente estupideces como lo hago yo, para que puedas ver las cosas de la forma en que ella me las hace ver a mi, para cuando un día te rechacen te sientas como yo el día de hoy. Maldita imaginación la cual me hace imaginarte en tu cama recostado boca arriba pensando en mi, pensando si llamarme o no y yo acá gritando sin que me puedas oír… Hazlo, llámame, te estoy esperando; cuando en realidad estás hablando con una de las tantas chicas que te persiguen. Maldita imaginación… maldita! Hoy estoy aquí frente a mi teclado con los ojos sufriendo de las fuertes lluvias que ellos liberan, estoy aquí con el corazón en las manos hecho pedazos por culpa de la maldita imaginación, por dejarme llevar, por ser tan idiota, por creer que siendo tu amiga podría demostrarte que me importas, esperando que algún día te sentaras y dijeras Muñeca esta siempre ahí, no tiene excusas para mí, me escucha, me busca, me lleva, siempre piensa en mí, me trata de complacer… Muñeca es la indicada para darle un giro positivo a mi vida y ser completamente feliz. Pero nunca te sentaste, nunca dijiste nada, apuesto a que ni lo has pensado. Pero mira… seguiré aquí, estaré para ti las veinticuatro horas del día como lo he hecho hasta el momento. Porque se ser una buena amiga, porque sé que me necesitaras, porque nadie será más sincero contigo que yo, porque guardo la esperanza de que vengas, si no es así y me equivoco culpare a la única culpable… Mi imaginación!
Por:
Muñeca Delgado de Jesús
3 de junio de 2009
11:05 am
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